Mal pensadas, bien implantadas.

 Ideas preconcebidas.



Como es propio del adoctrinamiento, es normal encontrar ideas preconcebidas en sus enseñanzas. Pero estas a su vez trascienden del plano académico para vincularse con el cultural, porque en verdad ese es su objetivo. Impregnar a la sociedad de ese criterio prefabricado que garantice lealtad y así lograr una óptima manipulación de las masas. Lamentablemente en nuestro país hemos sido víctimas de esto por varias décadas.
Mientras que con Machado, y años después con Batista, estuvimos sometidos a una cruda dictadura. En este período de tiempo se usó el poder militar principalmente para mantenernos sometidos. Pero el cubano seguía gozando de libertad de pensamiento, que aunque igualmente era peligrosa en aquellos momentos, seguía siendo libre de prejuicios y estigmas que limitan el pensamiento humano. Con la revolución del 59 se llevaron a cabo cambios en la economía, política, pero sobre todo en la cultura de la sociedad cubana. El pensamiento se empezó a encasillar y se desconfiaba de todo aquello que no estuviera a favor de la revolución. De ahí la famosa frase <<Con la revolución todo, contra la revolución nada>> Esto fue parte de un proceso de adoctrinamiento, lavado de cerebro y preselección de la información a la que accedíamos. Sin ir más lejos y poniendo un ejemplo verídico, en la entrevista que Ian Padrón recientemente le hizo a la estudiante de derecho que había participado en el programa de Televisión Nacional, Palabra Precisa. Según la entrevistada, el diálogo con el gobierno debe de estar condicionado a que ellos lleven las riendas del debate en todo momento. Afirmaba también, estar completamente de acuerdo que la información debe de ser controlada; al igual que desestima la presencia de toda prensa independiente en Cuba. En otras palabras, ellos deben decir: cómo, cuándo, dónde y qué se mostrará al público en un posible diálogo. Presupongo entonces que la presencia de la prensa acreditada, a parte de la oficialista, sea escasa o prácticamente nula, por lo que la información que le llegaría a gran parte de la población cubana por los medios tradicionales y del Estado no estaría completa, y a parte, convenientemente manipulada. Esta es una joven universitaria de la carrera de Derecho con 24 años de edad, por lo que es más común aún, encontrarse con una población más adulta que pronuncie criterios y opiniones erróneos como estos.
Aunque he dedicado algunas palabras y referencias en publicaciones anteriores a este tema. Creo que es justo y necesario hacer un análisis más a fondo de eso tan temible que nos han inyectado en nuestras mentes y nos bloquea como individuos en la sociedad en que vivimos. Mi preocupación viene de la mano con los, cada vez más, videos y comentarios que veo en Internet hablando deliberadamente de conceptos erróneos. Que de tanto repetirse, ha ocurrido como con la mentira, se han convertido en una “verdad”. Los más recientes han sido como Yosuam Palacios ha osado en comparar a Fidel Castro, Raúl Castro y otros dirigentes, con Jesucristo. Según sus palabras, estos han estado repartiendo panes y peces durante todo su mandato. Peor aun es ver como está empezando a circular peligrosamente la idea que Fidel Castro ha superado a Martí en el ideario político, humano e intelectual <<El hombre más grande de nuestra historia>>. Esto más que una barbaridad es un atropello a la historia de Cuba. El desmontaje de la historia del que tanto hablan que hace el imperialismo, ahora lo están aplicando ellos, aunque esto es algo que han venido haciendo desde hace mucho tiempo.
Por eso trataré de exponer breve, pero objetivamente, como se ha ido fabricando un grupo de ideas y criterios equivocados y descontextualizados que pueden ser muy peligrosos para el pensamiento cubano a partir de la revolución del 59. Tanto así, que todavía hoy muchos creen fervientemente en ellos a pesar de ser algunos hasta absurdos. Por supuesto, es difícil abarcarlos todos y me dejaré detalles en el camino. Creo que sería necesario todo un libro divido por volúmenes para abarcar a plenitud este Modus Operandi que tanto daño antropológico ha hecho en nuestra nación.

¿Cuba es Socialista?

Quisiera comenzar por la ideología. En Cuba se dice que el Socialismo es nuestra ideología política y la base de nuestro sistema. La Constitución ratifica de manera intransigente el carácter irrevocable de él y esta es la principal causa por la que creo que Cuba actualmente es una dictadura. Implantar una ideología y negarse a un cambio o a una evolución va en contra de la propia dialéctica de Carl Marx. Según el diccionario filosófico marxista de 1946 dice que: “(…) la dialéctica no concibe el desarrollo como un movimiento circular, como una simple repetición del camino ya recorrido, sino como un movimiento en línea ascendente.” Sin embargo en Cuba hoy, en pleno siglo XXI, donde el mundo no se detiene ni un segundo y se está en constante avance, evolución y cambio, se habla de continuidad. Esto hace preguntarse una cosa, ¿en Cuba hay Socialismo? Si tiene dudas para responder esta pregunta, y la teoría de la propia ideología no le es suficiente para iluminarlos por completo. Vayamos entonces a la práctica. China pronostica vivir en socialismo para el 2031 y Vietnam todavía no tiene una fecha clara, pero estima vivir en dicha condición a unos años más tarde que la fecha anterior. China hace menos de un mes ha pasado a ser el país más rico del mundo, teniendo un Libre Mercado como economía, existiendo aun en su población diferencias sociales bien marcadas y totalitarismo absoluto por parte de su Partido Comunista. Sin embargo afirman no vivir en socialismo y aun le faltan unos años para alcanzarlo. Cuba un país subdesarrollado, con una economía destrozada y una deficiencia política enorme, dice vivir en socialismo. En el día a día del cubano se puede apreciar que unos (la minoría) goza de privilegios sobre otros (la mayoría). El sistema económico que se ha impuesto informalmente es más duro y cruel que el propio capitalista en sí. Cada vez son menos los que pueden acceder a bienes y servicios de calidad y cada vez son más los que acceden a ellos de maneras informales. La balanza social se ha desequilibrado por completo dejando el margen entre clases cada vez más abismal. La línea que separaba antiguamente las ideologías se ha difuminado, para casi desaparecer por completo. Sin embargo los políticos y dirigentes actuales del país se siguen guiando por manuales soviéticos de hace más de 100 años, que ni se ajustan al contexto nuestro y que en la práctica fracasaron, a la vez que aplican medidas económicas neoliberales en una base que ya no se sabe que es. El que siga pensando que Cuba es socialista es porque niega la realidad, vive bajo el amparo de la corrupción o desconoce el verdadero significado de la palabra. Poderosos como China aspiran al socialismo y aun tiene características propias del capitalismo dentro de sus país. ¿Qué podemos esperar de Cuba entonces?

La pérdida de valores es el peor de los males.

Entrelazando este tema existe el <<aquello>> de creer que con un cambio de sistema, o de lo que sea, se traerán los “males del mundo capitalista”. Un perfecto ejemplo de esto no los dio Israel Rojas (integrante de Buena Fe). Él dice que no quiere que su hijo consuma drogas en la calle, que por eso y otras razones más, aborrece el capitalismo. ¿Acaso esto son males propio de una ideología o del ser humano en si? En Cuba perfectamente puede haber drogas en las calles, aunque esté estrictamente controlado. No se dejan de procesar a ciudadanos por el consumo y tráfico de sustancias ilegales dentro del país. Esto nada tiene que ver con una ideología sino con gobiernos. Hay países que tienen muy bajos índices de criminalidad: drogas, prostitución, asesinatos, robos y muchos otros delitos, y precisamente no son socialistas. Por lo que dejemos de pensar que el capitalismo traerá todo eso. <<Eso>> llegará si el gobierno quiere y lo permite. La codicia, la corrupción y el poder son mucho peor, y son precisamente los que permiten este tipo de males dentro de una sociedad por parte de los individuos, una sociedad como la nuestra que poco a poco sus individuos se han impregnado de todos ellos.

El que nos bloquea.

El bloqueo es una constante en cualquier discusión política que tenga que ver con Cuba, ya sea dentro o fuera del territorio nacional. Es la mejor excusa que ha tenido el gobierno durante todos estos años para justificar la mala gestión, la falta de resultado y la insuficiencia e ineptitud. Es la mejor arma que tienen para su diplomacia. No soy de los que niega el Bloqueo o lo minimiza, sin embargo reafirmo que el Bloqueo Interno que tenemos es mucho más dañino. Esta idea viene ligada en la dogmatización de la que hablamos y en la creación de un enemigo casi imposible de vencer que nos asecha todo el tiempo, el Imperialismo. El sistema político que tenemos actualmente prohíbe que cualquier ciudadano se enriquezca honradamente, pero esto no se aplica a la aristocracia (los hijos y familiares de dirigentes). Ellos si pueden tener negocios completamente capitalista en nuestras narices y enriquecerse con ellos libremente sin que la ley les afecte. Solo hay que ver las publicaciones de Sandro Castro (nieto de Fidel Castro) para sacar a cuentas entonces a quien y a quien no afecta el Bloqueo. En una ocasión con motivo de la inauguración de su bar en La Habana, en medio de una crisis económica y sanitaria, un seguidor del gobierno le comentó en Instagram que tuviera un poco de tacto con su publicaciones (parafraseando). ¿Esto quiere decir que es aceptado en nuestra sociedad que ellos si pueden gozar de privilegios y nosotros no? Por ejemplo, una guagua (ómnibus) pasa vacía por la parada de la universidad y no para al ver a decenas de estudiantes y profesores ahí varados. Algunos se preguntarán la naturaleza de este hecho, mientras que otros le echarán la culpa al Bloqueo por no haber petróleo para la ruta de esa parada. Sin embargo la respuesta es más simple de lo que podemos imaginar. ¿No cree? El bloqueo existe porque el gobierno estadounidense lo propicia, pero al cubano le conviene. En más y menos medidas otros países han sufrido un bloqueo parecido sin embargo han logrado reponerse (ejemplo Vietnam). Otros, como es nuestro caso, se han escudado en él para su mal manejo de la situación y esconder la corrupción. Han sabido encontrar las oportunidades cuando han querido, mírese la recién llegada flota de automóviles de turismo, los recién inaugurados hoteles de lujo y las exportaciones de productos en escasez nacional. Entonces, es peor el daño que nos hacen a nosotros mismo el Bloqueo Interno, que el que nos hace el Bloqueo del “enemigo”.

Fueron logros.

La educación y la salud es otro tema recurrente para alabar los “logros de la Revolución”. Se dice que es gratis y que en ningún país es así, esto es una mentira rotunda. Esa falacia la han sostenido durante muchos años y yo incluso me la creí por mucho tiempo. Ahora en mi residencia en España he podido experimentar la falsedad de esta idea preconcebida en la sociedad cubana. Aquí he disfrutado de salud pública y de muy buena calidad sin haber pagado un centavo, he sido vacunado contra la Covid-19 gratuitamente como se ha hecho en la mayoría de los países, incluido Estados Unidos de América. Veo como se puede acceder a la educación pública hasta el bachillerato y a la universidad a través de becas. Todo esto en España, país colero de la Unión Europea. No es perfecto, por supuesto, y las instituciones privadas funcionan mejor muchas veces, pero aun así el sistema público está a años luz por delante del que tenemos en nuestro país. Decir que la salud y la educación es gratis en Cuba es pensar que tu salario está libre de impuesto. Todo trabajo en Cuba se le impone una comisión que recae en el estado. Este a su vez debe, y digo debe porque no se ve que lo hagan mucho, invertir en la salud, la educación y los demás sectores públicos. Mientras, se siguen construyendo hoteles y resort de lujos, hay cada vez menos hospitales y escuelas en óptimas condiciones. Entonces lo que antes se consideraba un logro hoy es un espejo de la depauperada situación en la que se se encuentra el pueblo de Cuba. No pensemos más erróneamente que nuestro país es el único del mundo que ofrece salud y educación gratuita, incluso el llamado enemigo (Estados Unidos de América) la ofrece y en mejor calidad. No me gustan las comparaciones y esta es totalmente desequilibrada, pero ellos insisten en hacerla.

¿Quién está detrás del dinero?

Ya hemos visto como la aristocracia cubana hace y deshace a su antojo sin que nadie los juzgue y los procese por ello. Violan derechos, gozan de privilegios y hacen un despilfarro de dinero público, porque no se entiende como han llegado a tener tantos bienes materiales en la Cuba “socialistas” que ellos promueven, sin utilizar el dinero público. Sin embargo algo muy distinto pasa con los que se oponen, critican y exponen este comportamiento de la élite que hoy gobierna el país. Los que se manifiestan abiertamente contrarios al gobierno cubano actual son tildados de mercenarios, vende patrias, gusanos y muchas frase más denigrantes para cualquier persona. Esto se hace a la ligera sin ninguna prueba que evidencie esto. Es imposible que durante los 62 años del actual régimen todo el que se manifieste en contra del sistema sea financiado por un gobierno extranjero, es sencillamente absurdo estadísticamente y razonable. Por lo que de esa manera se ha tachado de “mercenarios” a cubanos honestos y honorables desde trabajadores, estudiantes, académicos, profesionales y figuras públicas. En el otro bando se paga con estímulos beneficiosos a los que asisten a los actos de repudios. Cabría pensar entonces ¿Quiénes son los verdaderos mercenarios? Son ellos, que necesitan un incentivo para defender eso. Este ha sido el método para tratar a toda la oposición en Cuba. Siempre estamos financiados por la mafia anticubana radicada en Miami, sin comprobarlo o presentar pruebas reales de ello. Simplemente se dice una palabra (mercenario) y ya se justifica delante de la ley y la población todo acto que se lleve a cabo contra ese grupo de personas o lo que hace ese grupo de personas. Póngase a pensar que todos esos que ya han sido identificados como disidentes si realmente estuvieran recibiendo dinero por lo que hacen o dicen, ¿no vivieran mejor? ¿no fuera de esperar que tuvieran una vida igual de lujosa que la aristocracia cubana actual? Dejemos de pensar que la oposición en Cuba no existe, sí, existe y hoy tiene más fuerza que nunca a pesar de estar fraccionada y no ser reconocida oficialmente.

El eterno <<gracias>>.

La gratitud. Este es otro gravísimo error en los que muchos caen. Es normal oír <<gracias a la revolución esto... gracias a la revolución aquello...>> Gracias a mis ancestros triunfó la revolución. Gracias a mi trabajo, a el de mis padres, al de mis abuelos se mantuvo y mantiene la “revolución”. Muchos le agradecen a Fidel Castro y a los guerrilleros por entrar triunfantes en La Habana, pero a muchos se les olvida que gracias a la mayoría de los cubanos pudieron entrar a la capital de esa manera. Sin embargo fuimos traicionados, así mismo como en el pasado la burguesía traicionó al proletariado ocurrió con el pueblo cubano. Muchas promesas fueron cumplidas, pero muchas más se quedaron en eso, en promesas. Nunca se hicieron elecciones verdaderas, nunca se restableció la Constitución del 40, se cerraron negocios honrados y así pudiera seguir, pero los exhorto a que revisen los archivos* ustedes mismos y en palabras de los “revolucionarios” vean como afirmaban hacer o no hacer algo para más tarde faltar en su palabra. El gobierno no está más que haciendo su función, puesto que es "socialista", así que agradecerle sería redundante.

Martí.

El párrafo anterior me hace inevitablemente remontarme al pasado. Recordar que según esta revolución actual se basaron en el ideario martiano, aunque no lo apliquen del todo. Sin embargo ninguno de nuestros patriotas fueron socialistas, mucho menos comunistas. Otra idea mal concebida. Ni José Martí, ni Antonio Maceo, ni Carlos Manuel de Céspedes, ni Ignacio Agramonte, por solo nombrar a unos pocos, tenían en mente el socialismo para Cuba ni tan siquiera existía. Sí, querían una Cuba libre de cualquier gobierno extranjero y también de cualquier gobierno opresor aunque fuera doméstico, por lo que decir que eran antimperialista está bien, pero decir que eran socialista o lo hubieran sido es especular, algo que no está permitido en la historia. José Martí luchó contra la represión, en favor de la libertad de prensa, de expresión y la Libertad de Cuba en general. Deseó una Patria digna, libre y soberana, que sus propios hijos decidieran su futuro y todo eso lo resume su frase:

"Con todos y para el bien de todos."
José Martí.

Martiano.

Lo siguiente más que una idea, es un método que es muy utilizado en la política cubana y sería más bien parte de un artículo en específico (que pienso redactar acerca de la politiquería en Cuba), y está estrechamente ligado con lo anteriormente dicho. Es utilizar las ideas de Martí para beneficio de los gobiernos, lo que se está haciendo hoy en día, pero solo las ideas que a ellos les interesa y sacadas de contexto. El propio Batista las utilizó en su discurso político y en unas elecciones amañadas. Hoy se desestiman palabras martianas como:
  • “Pueblo que se somete, perece.”
  • “Quien se alimenta de ideas jóvenes, vive siempre joven.”
  • “El vanidoso mira a su nombre; y el hombre honrado a la patria.”
  • “La libertad es el derecho que tienen las personas de actuar libremente, pensar y hablar sin hipocresía.”
  • “La crítica es el ejercicio del criterio: destruye los ídolos falsos, pero conserva en todo su fulgor a los dioses verdaderos.”
  • “Dígase Hombre y ya se han dicho todos los derechos.”
  • “En los pueblos libres, el derecho ha de ser claro. En los pueblos dueños de sí mismos, el derecho ha de ser popular.”
¿Qué le ha pasado por la mente al leer solo una de ellas? Se ajustan a nuestro contexto, ¿verdad?
Si todas estas ideas se han logrado implementar hoy en el ideario colectivo, ha sido gracias al adoctrinamiento, lavado de cerebro e ignorancia (sin ánimos de ofender a nadie). Puesto que el gobierno se ha nutrido de ideologías absolutistas y totalitarias que le dicen al hombre que hacer y que pensar. Una maquinaria tan bien elaborada y llevada a cabo, que nos ha hecho olvidar como pensaban nuestros antepasados. Hemos estado siempre a merced de lo que ellos quieren que pensemos y como quieren que actuemos. Perdimos ese pensamiento selectivo que caracterizaba a los pensadores cubanos y hemos sido desnutridos de ideas propias, a espera de que ellos nos nutran de lo que quieren que pensemos como individuos y como nación.
“Pensar y razonar por nosotros mismos, es el primer paso para romper las cadenas que nos atan a la esclavitud de ideas preconcebidas.”
Oscar Bermudez R.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Una piedra en el camino.

Construcción y economía: un desacorde en la sinfonía.

Puño y letra, bala y cañón.